El contrato en prácticas es un recurso utilizado por las empresas para incorporar a talentos jóvenes que desean aplicar sus conocimientos teóricos y desarrollar las habilidades prácticas que los preparen para retos futuros. Sin embargo, una de las preguntas más frecuentes es: ¿cuánto se cobra realmente por este tipo de contrato?Explicamos los aspectos fundamentales sobre el salario que puedes esperar al aceptar un contrato en prácticas.
¿Cuánto se cobra por Contrato en Prácticas?
El contrato en prácticas es una modalidad laboral diseñada para facilitar la incorporación de los jóvenes al mercado laboral, permitiéndoles adquirir experiencia en su campo de estudio mientras aplican los conocimientos teóricos adquiridos en su formación. Sin embargo, existe una gran variedad de dudas y confusiones respecto a cuánto se cobra en este tipo de contratos, cuáles son las obligaciones de las empresas y qué derechos tienen los trabajadores en prácticas.
¿Qué es un contrato en prácticas?
El contrato en prácticas es un acuerdo laboral regulado en muchos países que permite a una persona con formación reciente trabajar en una empresa para adquirir experiencia profesional relacionada con su área de estudio. Este contrato tiene una duración limitada y está diseñado para que el trabajador complete su formación y aumente su empleabilidad.
Requisitos principales
- El contrato debe celebrarse con personas que hayan finalizado sus estudios en un plazo máximo (por ejemplo, tres o cinco años según la legislación local).
- La actividad laboral desempeñada debe estar relacionada con la titulación del trabajador.
- La duración mínima y máxima del contrato varía según las normativas nacionales, pero suele oscilar entre 6 meses y 2 años.
¿Cuánto se cobra por un contrato en prácticas?
El salario en un contrato en prácticas suele ser inferior al de un contrato laboral estándar, ya que se considera que el trabajador está en una etapa formativa. No obstante, existen mínimos legales establecidos para garantizar que estas prácticas sean remuneradas de manera justa.
A nivel legal
En muchos países, la remuneración de un contrato en prácticas está vinculada al salario base o al convenio colectivo aplicable en el sector o la empresa. Por lo general:
- El salario no puede ser inferior al 60%-75% del salario establecido para un puesto equivalente durante el primer año de contrato.
- En el segundo año, el porcentaje puede aumentar al 85%-90% del salario base.
Por ejemplo:
- Si el salario anual para un puesto equivalente es de 20,000 €, el trabajador en prácticas podría cobrar entre 12,000 € y 15,000 € al año en el primer año de prácticas.
Prácticas no laborales o extracurriculares
En el caso de prácticas no laborales (como las gestionadas a través de universidades o centros de formación), la remuneración no siempre es obligatoria, dependiendo de la legislación local o del acuerdo con la institución educativa. Cuando existe una compensación, esta suele oscilar entre:
- 300 € y 600 € mensuales dependiendo del sector, la empresa y la duración de las prácticas.
Factores que influyen en el salario de un contrato en prácticas
El monto que se paga en un contrato en prácticas puede variar significativamente en función de varios factores:
a) Sector de actividad
Los sectores con mayores exigencias técnicas o especialización suelen ofrecer salarios más altos para contratos en prácticas. Por ejemplo:
- Tecnología: Los salarios pueden superar los 1,000 € mensuales.
- Educación o servicios: Las prácticas suelen tener compensaciones más bajas, en torno a los 500-700 €.
b) Tamaño de la empresa
Las grandes empresas, especialmente multinacionales, suelen ofrecer mejores condiciones económicas que las pequeñas y medianas empresas (PYMES). También suelen incluir beneficios adicionales, como vales de comida o transporte.
c) Localización
En ciudades con un coste de vida elevado, como Madrid, Barcelona o Ciudad de México, es más probable que los contratos en prácticas tengan salarios más altos para cubrir gastos básicos.
d) Convenios colectivos
En algunos sectores, los convenios colectivos establecen salarios mínimos específicos para contratos en prácticas, asegurando que los trabajadores reciban una remuneración proporcional a su actividad.
¿Qué derechos tiene un trabajador con contrato en prácticas?
A pesar de ser una modalidad laboral formativa, el contrato en prácticas otorga al trabajador ciertos derechos básicos, entre ellos:
a) Derecho a un salario
El trabajador en prácticas debe recibir un salario acorde a las condiciones establecidas por la ley o el convenio colectivo.
b) Cotización a la Seguridad Social
La empresa está obligada a dar de alta al trabajador en la Seguridad Social y cotizar por él, lo que significa que el tiempo trabajado contará para la jubilación, prestaciones de desempleo y otros beneficios.
c) Jornada laboral
El horario de trabajo debe respetar la normativa laboral aplicable y garantizar que el trabajador tenga tiempo para seguir formándose si es necesario. Además, en muchos casos no se permite la realización de horas extra.
d) Certificado de experiencia
Al finalizar el contrato, la empresa debe emitir un certificado que acredite la experiencia adquirida por el trabajador.
¿Cuánto cobra una empresa por alumno en prácticas?
Las empresas que ofrecen prácticas no laborales (en colaboración con instituciones educativas) a menudo reciben incentivos económicos o fiscales por parte del gobierno o las universidades. Estos incentivos pueden incluir:
a) Subvenciones directas
En algunos países, las empresas reciben ayudas económicas por cada estudiante en prácticas que acogen, siempre que cumplan ciertos requisitos. Estas ayudas pueden oscilar entre 500 € y 2,000 € por alumno, dependiendo de la duración de las prácticas y del programa educativo.
b) Bonificaciones en cotizaciones
Para contratos en prácticas laborales, las empresas suelen beneficiarse de bonificaciones o reducciones en las cotizaciones a la Seguridad Social, lo que reduce el costo total del contrato.
c) Convenios específicos
En programas de formación dual o colaboración con universidades, las empresas pueden recibir fondos adicionales para cubrir gastos asociados a la formación y supervisión de los estudiantes.
Ventajas de los contratos en prácticas para las empresas
Además de los beneficios fiscales y económicos, las empresas encuentran en los contratos en prácticas una oportunidad para:
- Formar a futuros empleados: Incorporar talento joven y adaptarlo a la cultura empresarial.
- Reducir costos: Los salarios más bajos y las bonificaciones en cotizaciones hacen que este tipo de contratos sean más económicos.
- Innovación: Los jóvenes en prácticas suelen aportar nuevas ideas y perspectivas, especialmente en sectores tecnológicos o creativos.
Retos y críticas a los contratos en prácticas
A pesar de sus beneficios, los contratos en prácticas no están exentos de críticas. Algunos de los retos más comunes incluyen:
a) Abusos laborales
En algunos casos, las empresas utilizan esta modalidad para contratar a trabajadores sin ofrecerles una formación real ni posibilidades de crecimiento.
b) Baja remuneración
El salario reducido puede ser insuficiente para cubrir las necesidades básicas de los trabajadores, especialmente en ciudades con un alto coste de vida.
c) Falta de estabilidad
Al ser contratos temporales, muchos jóvenes enfrentan dificultades para encontrar un empleo estable tras finalizar sus prácticas.
Cómo mejorar la experiencia de los contratos en prácticas
Para maximizar el beneficio tanto para las empresas como para los trabajadores, es esencial implementar buenas prácticas, como:
- Asegurar una formación real: Garantizar que el trabajador adquiera habilidades útiles para su carrera.
- Ofrecer un salario digno: Ajustar las compensaciones para que los contratos sean económicamente sostenibles para los trabajadores.
- Facilitar la transición a un contrato estable: Promover la contratación de los empleados en prácticas una vez finalizado el contrato.
Los contratos en prácticas son una herramienta clave para la inserción laboral de los jóvenes, permitiéndoles adquirir experiencia profesional mientras completan su formación. Aunque ofrecen múltiples ventajas, es esencial que tanto las empresas como las instituciones educativas y los gobiernos trabajen juntos para garantizar que estos contratos sean justos, formativos y económicamente viables.
En última instancia, los contratos en prácticas deben ser una vía para impulsar el talento joven y fomentar un mercado laboral más inclusivo y dinámico, donde la experiencia laboral no esté reñida con condiciones dignas y oportunidades de crecimiento.
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