Mandos intermedios: El desafío
Muchas compañías están experimentando importantes renovaciones en las filas de los mandos intermedios, lo que constituye un reto ya que los nuevos no tienen siempre la capacidad para ejecutar las estrategias que las empresas demandan en el corto plazo. Los altos directivos pueden dedicar todo su tiempo a crear estrategias, pero sin los mandos adecuados para implementarlas no se avanzará mucho en lograr los objetivos establecidos. La ejecución se revela cómo el factor crítico de las estrategias, ya que una lenta o parcial implementación, echa al traste la mejor estrategia.
Aparte de los problemas de implementación, el costo de las renovaciones está siendo extremadamente alto para las compañías. Y es que tan importante es saber captar mandos adecuados, cómo desarrollarlos y vincularlos al proyecto de empresa, y muchas compañías que sufren indicadores de gestión malos, se están dando cuenta de este hecho.
Los principales roles que deben exigirse a los mandos intermedios son, entre otros, los siguientes:
- Garantizar que las acciones, tareas y conductas se alineen con la visión de la empresa.
- Desarrollar a todos los niveles una cultura de servicio al cliente mediante buenos ejemplos.
- No solo dirigir a las personas sino además guiarlas y motivarlas.
- Tener buena visión para los negocios para facilitar tomas de decisiones adecuadas.
- Responsabilizarse de la creación de la cultura de empresa y no siempre acudir a los altos directivos para ser orientados.
- Movilizar a los trabajadores a impulsar la calidad e involucrarlos en el perfeccionamiento de los procesos.
- Garantizar el flujo correcto de información a todos los niveles.
- Controlar el comportamiento de los trabajadores y centrar la atención en los esfuerzos del equipo para entregar calidad.
El comportamiento y la actitud de los ejecutivos de nivel medio conforman, en última instancia, la cultura general de una organización. Para tomar el pulso de una organización, hay que observar cómo dichos mandos se comunican y el contenido de la comunicación (con comunicaciones y motivaciones positivas, los empleados podrán sentirse involucrados y responsabilizados).
Los altos directivos deben centrar su atención, en primer lugar, capacitar la capa de los ejecutivos de nivel medio (lo que se ha llamado “hacer hacer”), ya que estos pueden representar una gran diferencia en el crecimiento de la organización. Ellos conforman la cultura y establecen el tono y la conducta de la gente que ejecuta. Un fuerte personal directivo de nivel intermedio es igual a una fuerte organización.
Factores de éxito claves para convertirse en un fuerte mando intermedio
- Conviértase en propietario: Tome posesión de todo lo que esté dentro de su área de trabajo. Diríjase a sí mismo eficientemente, y esté siempre dispuesto a asumir la responsabilidad por el rendimiento suyo y de sus empleados. Los propietarios son altamente proactivos y se encuentran bien orientados en lugar de simplemente ser elementos reaccionarios y no avanzar.
- Tome la iniciativa:Siempre busque que el trabajo se realice, aun cuando se enfrente a un posible fracaso o a la adversidad. Su comportamiento positivo se convertirá en un hábito para usted y para los que usted dirige. Es mejor asumir una posición y seguirla que sentarse detrás de la barrera y actuar como abogado del diablo.
- Ponga en práctica su ingenio: Proporcione ideas que puedan resolver problemas prácticos, técnicos y sociales. Sea una fuente constante de nuevas y mejores alternativas, y esté dispuesto a hacerlas realidad. Haga suya la misión de reevaluar constantemente los procesos relacionados con las tareas y la gente que dependan de usted.
- Fomente la confianza: No hay nada peor para causar un pésimo impacto que las promesas no cumplidas. Cumpla con sus compromisos. Cumpla sus promesas cabalmente. Enfréntese a sí mismo o a cualquier otro que obstaculice su progreso por no ser suficientemente confiable. No recurra a echar la culpa a otros, ya que esto solo provocará desconfianza.
- Incorpore a la gente: La influencia es su herramienta más poderosa. Concéntrese en las necesidades de su gente y ayúdelos a sentir que son dueños de su propio espacio, sus tareas y sus éxitos. La capacidad de delegar con apoyo es vital y si se aplica correctamente conducirá al compromiso y al desarrollo.
- Oriéntese hacia los servicios: Los directivos exitosos se consideran a sí mismos como proveedores de servicios. Un fuerte sentido de colaboración los obliga a ver no solo quienes pueden servirle sino a quiénes pueden servir, creando a su vez una atmósfera de apoyo a las ideas y de ayuda a las tareas laborales cotidianas.
Mandos intermedios: Conclusión
En estos tiempos difíciles la alta dirección debe apreciar más el rol del mando intermedio y darse cuenta del valor que estos deben aportar a la organización. Darles a realizar más tareas administrativas no aumenta su rol sino que lo disminuye.
Adicionalmente es básico que estos mandos comprendan mejor cuál es el fin de su trabajo. Este conocimiento les permitirá priorizar su tiempo más eficazmente y garantizar que concentren su energía en realizar las tareas adecuadas.
Preguntas frecuentes
¿Qué son los mandos intermedios?
Los mandos intermedios son aquellos profesionales que ocupan una posición jerárquica entre los empleados operativos y la alta dirección. Son responsables de supervisar, coordinar y dirigir equipos de trabajo, asegurando que se cumplan los objetivos establecidos por la dirección. Su papel es clave en la gestión de recursos y en la comunicación dentro de la organización.
¿Cuál es la función principal de un mando intermedio?
La función principal de un mando intermedio es garantizar que las estrategias y políticas definidas por la alta dirección se implementen efectivamente en el nivel operativo. Esto implica gestionar equipos, coordinar tareas, resolver conflictos y optimizar los recursos para cumplir con los objetivos empresariales.
¿Qué habilidades debe tener un buen mando intermedio?
Un buen mando intermedio debe contar con habilidades de liderazgo, comunicación efectiva, toma de decisiones, gestión de conflictos y empatía. Además, debe ser capaz de motivar a su equipo y alinear sus esfuerzos con los objetivos estratégicos de la organización.
¿Cómo puede un mando intermedio contribuir al éxito de la empresa?
Un mando intermedio puede contribuir al éxito de la empresa al garantizar que los equipos operativos estén alineados con los objetivos empresariales, resolver problemas a nivel práctico, optimizar los procesos internos y servir de puente entre los empleados y la alta dirección, mejorando la comunicación y la eficiencia organizacional.
¿Qué desafíos enfrentan los mandos intermedios?
Los mandos intermedios enfrentan desafíos como la falta de poder decisional, la presión por cumplir con los objetivos de la alta dirección mientras gestionan las necesidades de los empleados, y la dificultad para equilibrar el liderazgo con la gestión de tareas operativas. También deben lidiar con la resistencia al cambio dentro de los equipos.
¿Por qué es importante la formación de los mandos intermedios?
La formación de los mandos intermedios es crucial porque les proporciona las herramientas necesarias para gestionar eficientemente a sus equipos, tomar decisiones acertadas y liderar con éxito. La formación ayuda a fortalecer sus habilidades de comunicación, resolución de conflictos y liderazgo, lo que se traduce en un mejor rendimiento organizacional.
¿Qué factores contribuyen al éxito de un mando intermedio?
Los factores que contribuyen al éxito de un mando intermedio incluyen una clara comunicación de objetivos, habilidades de liderazgo, capacidad para tomar decisiones rápidas, una buena gestión del tiempo y la habilidad para motivar a los empleados. Además, es esencial que tengan un entendimiento profundo de la cultura organizacional.
¿Cómo manejar los conflictos dentro de un equipo como mando intermedio?
Un mando intermedio puede manejar los conflictos dentro de un equipo fomentando la comunicación abierta y honesta, identificando las causas subyacentes del conflicto y buscando soluciones colaborativas. Es importante escuchar a todas las partes involucradas y actuar de manera imparcial, buscando siempre el bienestar general del equipo.
¿Cómo se puede medir el desempeño de un mando intermedio?
El desempeño de un mando intermedio se puede medir a través de indicadores como el cumplimiento de objetivos, la eficiencia del equipo, la satisfacción de los empleados, la capacidad para resolver problemas y la implementación de cambios en los procesos. Además, la retroalimentación de los empleados y de la alta dirección también es un buen indicador de su desempeño.
¿Cuál es la relación entre los mandos intermedios y la alta dirección?
Los mandos intermedios actúan como un puente entre la alta dirección y los empleados. Transmiten las decisiones estratégicas de la alta dirección a los equipos operativos y viceversa, asegurando que la comunicación fluya correctamente. Además, deben defender los intereses de su equipo ante la alta dirección, mientras cumplen con los objetivos establecidos.
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