Liderazgo y Productividad: ¿Cómo mejorar mi negocio?

La relación entre el liderazgo y productividad se ha confirmado gracias a diversos estudios. En dónde se demuestra que independientemente del tipo de liderazgo que desempeñes, este tiene una fuerte influencia en la productividad y la motivación que produzcas en tus empleados. 

Es fundamental que al ser el líder te prepares y desarrolles bien para poder afrontar de la mejor manera las situaciones difíciles, de ser necesario ir adaptando el tipo de liderazgo que necesites según el momento que te encuentres viviendo en tu empresa. Es necesario tener en cuenta que manejando diferentes formas de manejar la empresa conseguirás un margen de mejora en algunos aspectos que no se encuentren correctamente organizados.

Lo cierto es que para poder hablar y analizar la productividad de los empleados, es necesario conocer primero que es lo que hacen los líderes para motivarlos en sus diversos niveles de responsabilidad. 

• Objetivos visibles y claros. Es de suma importancia dejar en claro cuáles son los objetivos de la empresa, de este modo se reduce el nivel de dudas y cuestionamientos. Del mismo modo, es necesario enfatizar en los métodos que se emplean para conseguir los objetivos.

• Tener una comunicación eficaz. Tener una comunicación sana y positiva con tus empleados ayudará a conseguir que estos se contagien de este ánimo y se esfuercen más. 

• Redefinir el trabajo. La empresa Best Buy descubrió que al responsabilizar a los trabajadores por los resultados, la productividad se mejora en un 35%. Y no como se está acostumbrado a beneficiar exclusivamente por cumplir una cierta cantidad de horas.  

• Impulsar a la mejora continua. Si quieres que las personas se sientan impulsadas a dar cada vez más en la empresa, es necesario dar el ejemplo. Es por esto que es necesario adoptar nuevas tecnologías para mejorar la productividad y no estancarse en lo ya conquistado.  

• Reforzar el respeto entre colaboradores y compañeros de trabajo. Todo se trata del ejemplo, es por esto que para conseguir un ambiente laboral sano. Será necesario que como líder sea la primera persona en saber preguntar y escuchar a sus colaboradores. De este modo, alcanzar mejores niveles de productividad. 

Conseguir que un grupo de personas funcione de un modo autónomo, no es una labor sencilla. Teniendo en cuenta que se cuenta con una diversidad de personalidades y actitudes que poseen los miembros. El líder del grupo asume la responsabilidad de poder unirlos y conseguir un equipo de trabajo eficiente. 

• Invertir en los colaboradores. Un Lider es consiente que invertir en colaboradores no es una perdida de tiempo y que al contrario se trata de una buena inversión. 

• Potenciar y contratar el talento. Es necesario que impulsar la empresa, es por ello que se debe contratar al mejor talento de cada área. Un líder no teme rodearse de profesionales, al contrario, se siente más seguro. 

• Reforzar la comunicación. Según una encuesta realizada por Interact el 69% de los jefes suelen sentirse incómodos a la hora de conversar con los empleados. No obstante, lo cierto es que mantener una buena comunicación con tu equipo de trabajo garantiza el desarrollo y alcance de metas. 

• Predicar con el ejemplo. Este es uno de los puntos que ya hemos mencionado anteriormente, pero es necesario tenerlo en cuenta. El líder dentro de una empresa debe ser el ejemplo a seguir, de modo que el resto del grupo crea en el líder y trabaje con esmero para conseguir los objetivos.  

Bien sea que hayas optado por un liderazgo positivo, piramidal, horizontal o de cualquier otro estilo, lo cierto es que este afecta a la productividad. Tanto como de forma positiva como de forma negativa. Y es que un buen líder tiene la capacidad de llevar a su empresa a al logro de las metas y objetivos que se propongan. Mientras que un líder que tenga carencias puede llevar a la empresa a la peor situación o, en el mejor de los casos, no estar aprovechando de todos sus recursos. Siendo este un ejemplo de como el liderazgo y productividad se encuentran fuertemente relacionados.